I
Señor, Padre Santo, Dios todopoderoso y eterno, que con tu bendición levantas y fortaleces nuestra frágil condición, mira con bondad a este servidor tuyo N.; aparta de él la enfermedad y devuélvele la salud, para que, agradecido, bendiga tu Santo Nombre. Por Jesucristo nuestro Señor.
Amén.
II (Por un enfermo en peligro grave) Amén. III (Por un enfermo agonizante) Amén.
Señor Jesucristo, Redentor de los hombres, que en tu pasión quisiste soportar nuestros sufrimientos y dolores, te pedimos por este hermano nuestro, que está enfermo; tú que lo has redimido, aviva en él la esperanza de su salvación y conforta su cuerpo y su alma. Tu que vives y reinas por los siglos de los siglos.
Padre Misericordioso, Tú que conoces hasta dónde llega la buena voluntad del hombre, Tú que estás siempre dispuesto a perdonar nuestras culpas, Tú que nunca niegas el perdón a los hijos que acuden a Ti, compadécete de tu hijo/a que se debate en agonía; te pedimos que, ungido con el óleo Santo y ayudado por la oración de nuestra fe se vea aliviado en su cuerpo y en su alma, obtenga el perdón de sus pecados y sienta la fortaleza de tu gracia . Por Jesucristo, tu Hijo, que venció a la muerte y nos abrió las puertas de la vida y contigo vive y reina por los siglos de los siglos.